domingo, 28 de abril de 2013

Camiseta del Athletic para Liher

Os voy a hacer una confesión... no me gusta hacer camisetas. Puede que esto os sorprenda, pero tengo mis razones para que no me guste. La primera (y fundamental) es que dan mucho trabajo: te dicen "quiero una camiseta de no-se-qué" y ahí empieza un trabajo enorme (aunque no lo parezca). Hay que buscar imágenes que puedan quedar bien en aplicación, que sean bonitas y sin excesivos detalles (las hay muy bonitas pero muy poco apropiadas para hacer en aplicación)... y eso lleva bastante tiempo de búsqueda hasta que das con la imagen perfecta. Una vez que la has encontrado toca la parte de modificar la imágen y ponerla "en espejo" y si hay algún texto (generalmente el nombre del niño destinatario) hacer lo mismo... después hay que crear un documento con todas las imágenes en diferentes tamaños para poder elegir el adecuado en función de la camiseta (no tengo impresora en casa y suele tener que imprimirme el documento mi marido en el trabajo)... Una vez decidido el tamaño de las aplicaciones hay que elegir tela, calcar la fliselina, pegarla en la tela, recortar la tela, montar la camiseta y por último todo el trabajo de coser a mano la aplicación... Para una única camiseta puedo estar tranquilamente 8 o 10 horas trabajando en ella (a veces incluso más), poniendo mimo y cariño en todas y cada una de las puntadas, cada vez que me pincho el dedo porque la aguja que utilizo pincha mucho. ¿Y cuánto se puede pedir por un producto así personalizado que te ha llevado tántas horas crear? pues dado como está la economía no puedes pedir lo que realmente vale, pero mis más allegados siempre me dicen que cobro poco (muy poco en realidad, segunda razón por la que no me gusta hacer camisetas) teniendo en cuenta que se acaba teniendo una camiseta exclusiva y hecha a mano especialmente para una persona.

Una vez hecha la confesión reconozco también que cuando me proponen hacer alguna por encargo no consigo negarme porque quedan táaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaan bonitas una vez terminadas que en cierta medida me compensan todas las horas invertidas en ella sólo por ver la cara de satisfacción de la persona que me la ha pedido cuando la recoge  "Ha quedado preciosa Teresa, muchas gracias"... ¿qué más puede pedir una artesana, sino que aprecien su trabajo? Además he de decir que agradezco enormemente la confianza que depositan en mí cuando me hacen un encargo ya que, salvo por la temática de la camiseta (que esa suele ser más o menos cerrada), siempre me dejan libertad para hacerla como yo considere: "Como tú quieras Teresa, que tienes mucho gusto", y la verdad, a una se le sube el ego al cielo al oir esas cosas.

En fin... después de toda esta reflexión en voz alta paso a enseñaros la camiseta de hoy. Maider (amiga del barrio) después de ver la camiseta de búhos para Oihane me pidió que le hiciera un par de camisetas, una para cada uno de sus hijos: para el mayor, Liher, una del Athletic (de Bilbao! por supuesto!) y para el pequeño, Enaitz, una de dinosáurios (aunque finalmente no será de dinosáurios, sino de Angry Birds). Os enseño la de Liher, que es la que está terminada (la de Enaitz espero poder hacerla la semana que viene sin falta). 

Partiendo de una camiseta básica blanca he terminado haciendo esta preciosidad (no es por echarme flores, pero es que es verdad que ha quedado muy bonita).


Para que pareciera algo "oficial" compré en la mercería un escudo del equipo de los que se pegan con la plancha, aunque yo haya optado también por coserlo a máquina (la experiencia me dice que sinó con los lavados se acaban despegando). Y como en nuestro equipo juegan "los leones" estaba claro que el motivo tenía que ser eso: un león. Me costó bastante dar con uno que me gustara, pero cuando lo encontré supe que quedaría precioso. Los ojos van bordados por dentro y la boca, esa boca tan fina, también lo está.


Y como si de la camiseta de un jugador se tratara, por la parte trasera he puesto el nombre en mayúsculas y con tela negra.


Aunque no lo parezca el nombre también va festoneado, lo que pasa que he usado hilo negro y por eso no se aprecia.


Ahora me falta ponerme con la camiseta para Enaitz... a ver si la hago sin falta para la semana próxima. En cuanto la tenga os la enseño.

¡Besos y hasta la próxima!

1 comentario:

  1. Pues es que ha quedado preciosa!! Y es una camiseta única, hecha con mucho tiempo y dedicación, así que seguro que vale mucho más de lo que cuesta

    Es una pena que a veces no se aprecie el trabajo que llevan las cosas hechas a mano, y encima personalizadas...

    Seguro que Liher la luce orgulloso ;)

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